La crisis de Brasil: las razones de una debacle
Brasil no consigue ganarle a la Argentina desde la semifinal de la Copa América 2019. Invitamos a un colega, amigo de la casa, a que profundice sobre los motivos de la reciente supremacía albiceleste.
Mientras la Argentina atraviesa uno de los mejores momentos de su historia a nivel de selecciones, siendo vigente campeón del mundo y bicampeón de América, su clásico rival agoniza. Ya son 23 años sin conquistar la Copa del Mundo. Eso significa que, en caso de una nueva decepción en 2026, la Canarinha vivirá el mayor periodo de su historia sin levantar un título mundial: el máximo periodo de sequía fue de 24 años entre 1970 y 1994.
Las razones del declive de Brasil en los últimos años, y en consecuencia, la brecha con respecto a nuestros hermanos argentinos, son varias. Incluyen problemas administrativos, que provocan cambios desordenados en la dirección técnica, y un nivel técnico por debajo de lo esperado de sus principales figuras cuando se ponen la camiseta verde y amarilla, por ejemplo.
Durante la era Scaloni en Argentina, iniciada tras el fracaso en Rusia 2018, Brasil tuvo cuatro entrenadores: mantuvo a Tite para el ciclo 2018-2022, luego contrató a Ramón Menezes como interino, “compartió” a Fernando Diniz con Fluminense y, por último, eligió a Dorival Júnior, quien está en el cargo desde enero del año pasado.
Según gran parte de la crítica especializada en Brasil, estos cambios reflejan la falta de capacidad administrativa de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), personificada en su presidente, Ednaldo Rodrigues. Centralizador, el dirigente acumula decisiones con criterios cuestionables, como se vio en el pintoresco paso de Fernando Diniz. El entrenador, hoy sin club, dirigía a Fluminense en julio de 2023 cuando fue invitado a asumir la Selección.
En ese momento, acababa de ganar el Campeonato Carioca con el Tricolor, venciendo al poderoso Flamengo en la definición. Gozaba de prestigio en el club y estaba en plena disputa de la Copa Libertadores. Se decidió entonces que Diniz se dividiría entre ambos roles. Y eso tenía una razón que terminó complicando aún más al presidente de la CBF: Diniz iba a ser un “interino” hasta la llegada del italiano Carlo Ancelotti. Algo que, como sabemos, no se concretó.
Ancelotti no vino y la CBF quedó expuesta a una situación vergonzosa. Con Diniz, los resultados tampoco mejoraron. En las Eliminatorias, el técnico sumó dos victorias, un empate y tres derrotas, con un 38,8% de efectividad. El entrenador que ganó la Libertadores en 2023 mientras dirigía a la Selección dejó el cargo tras seis partidos, con el tercer peor rendimiento de la historia, considerando a técnicos que dirigieron al menos cinco encuentros.
Los malos resultados de este período, cuyo último título fue la Copa América 2019 en casa, también tienen que ver con el desempeño individual y colectivo dentro del campo. Brasil extraña a sus principales figuras, protagonistas en las ligas más importantes del mundo, pero muy por debajo cuando visten la Amarelinha. El mayor exponente es Vinicius Júnior, elegido por la FIFA como el mejor jugador del mundo en la última temporada. Con la Selección, el delantero jugó 38 partidos y anotó solo seis goles –el último fue el que decidió la victoria 2-1 sobre Colombia el jueves (20) en Brasilia. Además, suma cinco asistencias.
Brasil tampoco puede contar, desde hace tiempo, con el jugador más relevante de esta generación. Desde 2019, el crack que actualmente está en Santos ha lidiado con lesiones y ha jugado muy poco con la Selección. Sufrió al menos siete lesiones importantes, que lo alejaron de por lo menos 21 partidos. El nombre de Neymar estaba en la última convocatoria, pero fue dado de baja nuevamente por un problema muscular.
La búsqueda de Brasil por un equipo ideal, protagonistas y un estilo de juego claro en medio de todos estos problemas, sin embargo, no desanima a todos. Campeón de la Copa Confederaciones 2009, uno de los líderes del equipo en el Mundial 2010 y figura respetada por los argentinos, el exvolante Felipe Melo hace algunas consideraciones sobre el dominio albiceleste sobre la canarinha en los últimos años. Para el actual comentarista, no existe una disparidad técnica real y fue una serie de factores favorables a Argentina lo que determinó la percepción actual.
“En términos de títulos, Argentina está muy por encima. Pero en cuanto a fútbol, al mejor equipo, no. No hubo un cambio radical. Argentina tiene un buen equipo que encajó. Era un equipo que perdía, pero siempre llegaba –como en la final en Brasil. Era un gran equipo del medio hacia adelante. Y apareció un arquero que empezó a atajar todo. Y tienen a Messi, que es un extraterrestre. El dueño del equipo junto con Julián Álvarez y Mac Allister, que fueron sorpresas muy agradables en el Mundial. Es una gran etapa, con la confianza por las nubes, y se va a mantener así hasta que llegue una generación floja. En cambio, Brasil está cambiando todo, sin que nadie sepa a qué juega. Pero el equipo de Brasil es buenísimo. Tiene de todo. Mucha calidad. Pero falta ajustar la dirección”, analizó.
La visión de Felipe Melo sobre la calidad de los jugadores brasileños es compartida por el propio grupo y su entrenador actual, Dorival Júnior. Contra Argentina, no hay mejor oportunidad para demostrar que tienen razón. Un superclásico donde el máximo campeón de la historia llega teniendo que probarse frente a los actuales dueños del mundo, una posición que Brasil ya empieza a ver cada vez más lejos.
Brasil esta perdiendo por 'CORRUPCION' en los promotores o en los busca talentos brasileños....alguien debe para eso..de lo contrario no habra mas triunfos....ni copas America y menos Copas del mundo...el dinero los esta afectando...lamentablemente...eso debe parar..!!!
Soy brasileño y, no sé si lo has visto, pero un reciente informe sobre algunos escándalos dentro de la FEBIC apareció en las noticias. Recomiendo encarecidamente leerlo, aquí está el enlace: https://piaui.folha.uol.com.br/materia/uma-radiografia-da-gestao-de-ednaldo-rodrigues-na-cbf/