Lo viejo funciona, Juan
Venus Williams regresa al US Open a los 45 años gracias a un wild card. En la gira previa cosechó una victoria ante una Top 40, en Washington. Un debut durísimo: Karolina Muchova.
Nueva York. Septiembre de 2000. Venus Williams tenía una nueva oportunidad de revancha con apenas 20 años recién cumplidos. Del otro lado de la red estaba Martina Hingis, quien le había negado el título en 1997 -en su primer US Open- tras aplastarla en la final por 6-0 y 6-4 y también la había eliminado 12 meses antes en las semifinales en un reñido duelo a tres sets. El duelo sobrepasaba lo tenístico. Por entonces, desde su irrupción -y durante muchos años más-, la relación de las Williams y su colegas no gozó de buena salud. La confrontación entre las hermanas y la suiza por entonces era vox populi. Y la historia no pintaba bien: la N°1 del mundo mandaba 5-3 en el tercer set.
Sin embargo, fundida en un amarillo furioso sobre el aún verde de las canchas duras de Flushing Meadows, Venus dibujó una de las mejores reacciones de su carrera: por rival, escenario e instancia. Fueron cuatro games consecutivos para sellar la victoria con un error no forzado de derecha de Hingis a la red y un saludo de manos poco amistoso. "Solo lo deseaba, tenía esta racha ganadora (NdR: de 25 partidos) y ella ya había ganado el Abierto de Estados Unidos, así que sentí que quizás era mi turno", declaraba Venus Williams tras la victoria.
Dos días después, un nuevo desafío: Lindsay Davenport, otra con la que no se llevaba nada bien pese a compartir equipo de Fed Cup (hoy la BJK Cup) y verduga suya en las semis de 1998. Fue un sólido 6-4 y 7-5 ante la N°2 del mundo y coronar una serie de tres triunfos seguidos ante Top 10. Fue el primero de sus dos US Open; al año siguiente repetiría en la definición frente a su hermana Serena, en la 1era. de las nueve que disputaron por el título de un Grand Slam.
Washington. Julio 2025. Venus Williams está lista para salir a la cancha. La expectativa es enorme. Con 45 años y a 16 meses de su último partido, la mayor de las hermanas regresa a la acción. Atrás quedó una cirugía, una miomectomía para extirpar fibromas uterinos, que parecía determinar su adiós. Del otro lado, la también estadounidense Peyton Stearns, N°35 del mundo y semifinalista unas semanas atrás del WTA de Roma.
“Me tomó muchísimo esfuerzo y llevo meses entrenando sólo para llegar a este momento”, comentó en Washington. “Es muy diferente, ahora estuve preparándome para competir, pero hace un año estaba preparándome para operarme”, resaltó tras convertirse en la jugadora de mayor edad en ganar un partido de singles de la WTA desde Martina Navratilova en 2004, quien lo hizo con 47 años.
Su vuelta tenía un fin mayor que jugar en Washington. O en Cincinnati, como lo hizo unos días después. Su luz en el faro era Nueva York, con el objetivo de jugarlo por vez N°25. Y para eso necesitaba un guiño de los organizadores, que obviamente llegó. Venus Williams recibió uno de los wild cards para el cuadro principal. Para que el impacto no sea tan grande para ella, también fue invitada -y jugó hace unos días- al torneo de dobles mixtos en dupla con el también estadounidense Reilly Opelka. Su debut no será nada sencillo: Karolina Muchova, la talentosa checa N°13 del mundo y semifinalista aquí en las últimas dos temporadas. La cita será el lunes por la noche, en el primer turno de un segurísimo colmado Arthur Ashe.
Febrero de 2009. Mientras Venus Williams se consagraba en el WTA 1000 de Dubai y lograba su título N°41 (de sus 49), en Carlsbad, California, nacía la pequeña Julieta, hija de Pablo Pareja, un estadounidense hijo de un padre inmigrante colombiano, y de Adriana, originaria de Bogotá. Este mismo lunes, unas horas antes que Venus, esa niña hoy ya con 16 años saltará a la Cancha 17 para enfrentarse a Elena Rybakina.
Julieta, N°1 de Juniors, no dejó pasar la oportunidad y tuvo la chance de entrenarse por estos días con la mayor de las Williams, una leyenda que sigue inspirando generaciones y generaciones de tenistas. "Fue especial compartir la misma cancha con ella. Tener la oportunidad de ser invitada en el US Open junto a Venus. Es una figura tan importante, y es realmente especial estar a su lado", le resaltó a CNN Sports Pareja, la jugadora más joven en el cuadro principal.
El legado de Venus es enorme e incalculable. Tan solo pensar que la tienen como referente chicas que no llegaron a gozar de sus años de gloria. Pero sí la vieron pelear y pelear por volver a jugar. Desde el síndrome de Sjögren, una enfermedad autoinmune debilitante que puede causar dolor articular y fatiga y se le detectó en 2011, a la última cirugía a la que se sometió hace 16 meses. Una historia sin dudas de resiliencia.
“¿Por qué vuelvo al tenis?... ¿por qué no?”. Así, sin rodeos y dando vuelta la pregunta. Venus lo tiene clarísimo. Ama al tenis y quiere seguir jugando. Aún tiene mucho para dar de la mano del coach Hugo Armando, un estadounidense hijo de argentinos y que vivió en su infancia en Mendoza. Regresos hubo muchos, y de calibre: Justine Henin, Kim Clijsters y Ash Barty, para dar algunos nombres. Pero todos bajo otras circunstancias.
Ya que estamos, no sea cosa que le pegue las ganas a Serena, ¿no? La vimos por estos días muy bien físicamente y cercana al tenis, ofreciendo la introducción al Salon de la Fama de Newport nada más y nada menos que a su archirrival Maria Sharapova. “Puede tomarse seis meses de descanso y regresar sin problemas. Ese talento no se puede enseñar, es simplemente muy buena. No sé qué va a hacer. Pero si vuelve, estoy segura de que se los hará saber”, expresó Venus sobre su hermana, quien no juega desde hace 3 años.
Pero volvamos a Venus, el hilo de la cuestión. Tic Tac. A horas de su duelo ante Muchova en el Arthur Ashe. Y ya lo palpita. “Es súper emocionante estar de vuelta. No pasa de moda; simplemente se vuelve más emocionante. Tengo muchas ganas de que llegue el lunes por la noche”, destacó en prensa en el US Open. “Quiero dar lo mejor de mí misma. No he jugado tanto como las demás, así que es un reto diferente. Sólo intentaré divertirme, relajarme y alcanzar mi mejor nivel”, continuó.
“Creo que siempre jugaré al tenis. Lo llevo en la sangre. Así que no importa si es ahora o dentro de 30 años. El tenis siempre será una de las partes más importantes de mi vida”. Firma. Venus Williams, que se prepara para su US Open N°25 con 45 años.