Los Pumas, protagonistas en el Rugby Championship más parejo de la historia
Luego de cuatro fechas disputadas, las cuatro selecciones tienen dos triunfos y dos derrotas. Final abierto.
El Rugby Championship comenzó a jugarse en 2012. Después de una dura batalla en los escritorios de World Rugby y de SANZAR, organización que integraba a Nueva Zelanda, Sudáfrica y Australia, la Unión Argentina de Rugby logró insertarse en una competencia anual. Pasaron 13 campeonatos y nunca hubo la paridad que hay en esta edición. ¿El motivo? Los Pumas están en su mejor momento desde que se creó el torneo. Australia, que venía de muchos años en baja, recuperó su esencia y está dando pelea nuevamente. Springboks y All Blacks, los dos que dominaron todos estos años, están teniendo una irregularidad poco común para ellos.
Ya se jugaron cuatro fechas y todos ganaron dos partidos y perdieron dos. Las series que se disputaron hasta ahora fueron Pumas-All Blacks en territorio argentino, Boks y Wallabies en tierras sudafricanas, y en la última ventana chocaron aussies contra argentinos en Australia, y los dirigidos por Rassie Erasmus visitaron a los maoríes. En cada uno el que perdió en el primer partido se tomó revancha en el segundo.
Los dirigidos por Felipe Contepomi tuvieron todo para ganar en el primer duelo en Townsville, pero se les escapó de las manos en el final de una manera increíble por 28-24. En Sydney, a estadio lleno, Los Pumas se tomaron revancha. Al igual que en el primer partido se fueron con una buena ventaja al descanso, y esta vez sí pudieron resistir un complemento más flojo: la victoria fue 28-26, con un Santiago Carreras afilado a los palos y autor de 25 puntos (el único try fuel capitán Julián Montoya). ¿Qué pasó en Nueva Zelanda? Después de la dura derrota siete días atrás, los de Erasmus le propinaron la peor derrota de la historia a los All Blacks: apabullante 43-10 en Wellington.
El líder de la tabla es Australia, con 11 puntos gracias a tres bonus. Lo siguen Sudáfrica y Nueva Zelanda, ambos con 10. Y cierran Los Pumas con 9. Ahora faltan dos fechas y cualquier cosa puede pasar. Todos pueden coronarse. Pero, ¿cómo había sido hasta ahora?
Desde que Los Pumas entraron al Rugby Championship, el dominio casi absoluto fue de los All Blacks. En 2012 y 2013 arrasaron y salieron campeones invictos. En la primera edición, el segundo fue Australia con apenas tres victorias. Y en la siguiente, los Boks terminaron escoltas con cuatro triunfos. ¿Los Pumas? En esos 12 partidos, apenas un empate con Sudáfrica y 11 caídas.
La temporada 2014 también para Nueva Zelanda. En aquel momento, los dirigidos por Steve Hansen, tuvieron a los africanos como su principal rival, pero ya se habían consagrado campeones antes de la última fecha con su victoria ante Pumas en La Plata. Australia perdió con Los Pumas y todavía estaba lejos de su mejor versión, aunque al año siguiente, con formato reducido, sorprendió y logró romper la racha de los hombres de negro. Fueron solo tres partidos y los Wallabies finalizaron invictos. Nunca más pudieron ganar el torneo.
Entre 2016 y 2018, los All Blacks ganaron 17 partidos de 18. Fueron imparables. En ninguno hubo un equipo que llegue al final con chances de arrebatarle el título. Australia seguía sin rumbo, y los Boks alternaban entre grandes triunfos y derrotas dolorosas (como contra Los Pumas en Mendoza en 2018). Los argentinos todavía estaban muy lejos, más allá de algunas victorias que daban algo de esperanza para el futuro.
2019 fue un año de Mundial y otra vez tuvo un formato diferente con apenas tres partidos, y Nueva Zelanda perdió su hegemonía. ¿El campeón? Sudáfrica. ¿Escolta? Australia.
La pandemia de Covid-19 hizo que el torneo se modifique completamente en 2020. Sudáfrica no participó y toda la competencia se disputó en una burbuja en Australia. Ese torneo de Tres Naciones tuvo el golpe más impactante de la historia de Los Pumas en el certamen, y quebraron esa barrera de no poder ganarle a los All Blacks. Sin embargo, tras ese batacazo, Nueva Zelanda tomó control de nuevo y terminó llevándose el torneo. Sí, una vez más. Lo mismo sucedió en 2021, 2022 y 2023.
Ya llegando a la actualidad, en 2024 se empezó a ver una paridad más grande. No solo los Springboks cortaron la racha de los de negro, sino que Los Pumas, ya dirigidos por Felipe Contepomi, consiguieron vencer en un mismo torneo a las tres potencias. Australia, todavía demasiado lejos de los demás. Los aussies ganaron un solo partido y perdieron cinco.
Hoy, realmente, cualquiera le puede ganar a cualquiera. De local o de visitante. Eso se demostró en las primeras cuatro fechas. Los Pumas tienen un plantel súper competitivo. Cambian algunas piezas y el rendimiento no decae. En la mayoría de los puestos tienen varias opciones, y esa diferencia física que siempre hubo sobre todo con Sudáfrica y Nueva Zelanda, ya no se nota. Además, los Wallabies tuvieron un recambio generacional que le empezó a dar algunos resultados. Si bien contra los argentinos podrían haber perdido la serie 2-0, en tierras sudafricanas sorprendieron ni más ni menos que a los Boks.
La verdad también es que Sudáfrica no está consiguiendo la regularidad de años anteriores, y los All Blacks todavía no tienen la consistencia y la dosis de imbatibilidad que supo tener el entrenador Scott Robertson con Crusaders. Ya en este torneo perdieron con Los Pumas de visitantes y con los Boks de locales. La única vez que cayeron en tres oportunidades en un torneo fue el año pasado. ¿Se repetirá en 2025? Quizás.
Ahora restan dos fechas. El torneo tiene una semana de descanso y luego, el 27 de septiembre, Sudáfrica será local ante Los Pumas en Durban (está el recuerdo de la victoria épica de 2015) y Nueva Zelanda recibirá a los aussies en el mítico Eden Park. Allí los All Blacks no pierden desde el 3 de agosto de 1994. En aquella oportunidad fueron derrotados 23-20 por Francia.
La última jornada, el 4 de octubre, tendrá la curiosidad de que los argentinos serán locales en Twickenham, Londres, frente a los Boks, mientras que Nueva Zelanda visitará a Australia en Perth.
Habrá que ver qué pasa con los bonus en la siguiente jornada, pero podría darse que los cuatro seleccionados lleguen a la última fecha con posibilidades. Eso nunca pasó. Este es el Rugby Championship más parejo de la historia y el desenlace está abierto. Puede ser el undécimo título de los All Blacks (contando la edición 2020 que tuvo solo tres participantes), o el tercero de los Boks. Y también, por qué no, el segundo de los Wallabies, o incluso el primero de Los Pumas.
Todos pueden soñar.







